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El mito de las calorías: frustración y esclavitud

  • Foto del escritor: Lidwine
    Lidwine
  • 17 jun 2018
  • 3 Min. de lectura

Antes de cada comida es el mismo ritual: un cálculo matemático meticuloso. ¿Cuántos contáis calorías en vuestro plato hasta el punto de olvidar el placer de comer?


¿Qué es una caloría?


Una caloría es una unidad de calor, el calor producido cuando un alimento se degrada. En otras palabras, una caloría es energía. Esta definición es importante porque me gustaría que veas esta caloría como una necesidad: sin energía estás paralizado. Sin calorías (es decir, sin energía) ya no caminas, ya no hablas, ya no piensas. El primer paso es dejar de tener miedo a las calorías, con ese miedo no vivirás.



Todas las calorías no son iguales


La ingesta calórica diaria recomendada en las mujeres es de aproximadamente 2000 calorías. Qué quiere decir eso ? 2000 calorías de qué? Ensalada? Pollo? Frutas o pasteles? Eso no tiene sentido. Primero, porque todos somos diferentes, cada uno tiene su propio metabolismo pero, sobre todo, porque no todas las calorías son iguales.


Los alimentos ricos en calorías pueden proporcionarte nutrientes esenciales cuando los alimentos bajos en calorías no te proporcionarán absolutamente nada como un nutriente esencial.

A menudo escuchamos aquí y allá que debemos evitar las grasas porque son demasiado calóricas. Primero, ¿de qué tipo de grasas estamos hablando? La integridad de nuestras células (la unidad básica de los vivos) se basa en la "grasa": la membrana plasmática que delimita cada célula y que la protege se compone esencialmente de fosfolípidos. El 55% de nuestro cerebro no es más que grasa. Nuestras hormonas sexuales se derivan todas de la grasa, y más específicamente del colesterol. ¿Sabías que algunas grasas pueden hacerte perder peso?


Coma menos grasa, menos calorías para perder peso


Me gustaría citar un experimento realizado por dos científicos: Kekwick y Pawan. Estos basaron su experimento en tres grupos de población sometidos respectivamente a tres tipos distintos de dietas muy restrictivas (1000 calorías por día). El primer grupo comió 90% de lipidos (grasa). El segundo, 90% de proteína y el tercero, 90% de carbohidratos (azúcares). Esta dieta duró 3 semanas.


Podríamos pensar que el resultado del primer grupo fue a engordar, ¿no? ¿Resultados? ¡El grupo de los lípidos y proteínas perdió más de 2 kilos por semana mientras que el grupo de carbohidratos engordó 700 gramos por semana!


Lo esencial no es, por lo tanto, el número de calorías, sino el tipo de alimento. Esto enlaza con lo que mencioné anteriormente: no todas las calorías son iguales. Los lípidos no son responsables del sobrepeso, sino más bien el exceso de carbohidratos, que se acumula como tejido adiposo.


La conclusión a la que llegaron con aquel experimento fue la de que, contra la obesidad, basta con contar calorías. Solo que..., ¿cayó la tasa de obesidad? No, ¡incluso se triplicó! Por lo tanto, este sistema está totalmente cuestionado por su misma ineficiencia.


Varias mujeres jóvenes a las que asesoro me explicaron que su sobrepeso / obesidad había aparecido después de hacer una o más dietas muy restrictivas (contando cada caloría) con el fin de perder solo unos pocos kilos. Estas mujeres, aún adolescentes, pensaban que estas etapas tan restrictivas repetidas de forma intermitente no tendrían por qué tener ninguna consecuencia. El resultad final y a largo plazo (es decir, con algunas lagunas de por medio), es un aumento de peso que varía entre los 10 y 20 kilos. Esto no es sorprendente porque nuestro cuerpo tiene muy buena memoria...


Entonces deja de hacerte daño. Aprende a comer saludablemente sin renunciar a la noción de placer y sabor. Deja de contar y de frustrarte, come de forma equilibrada... pero siempre sin excesos.


Si te ves sobrepasad@ te aconsejo te pongas en mano de un profesional, Kambia te puede ayudar.


Lidwine


 
 
 

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Coach nutricional, Fitness, Talleres y recetas

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